6 disparates que supuestamente sabes sobre el Heavy Metal, gracias a la PN y la mediocre prensa dominicana

6 disparates que supuestamente sabes sobre el Heavy Metal, gracias a la PN y la mediocre prensa dominicana

Originalmente no teníamos ninguna intención de tocar el tema, porque en serio, guarever con ErreDé. Pero viendo el empeño que le mete la prensa y algunas autoridades dominicanas a ser particularmente estúpidas, hemos llegado a ese punto más allá del “bakano, en serio? Aunque sea léase Wikipedia” a tener que directamente gastar nuestro precioso y limitado ancho de banda en esta vaina.

Acá en KeDificil siempre hemos estado curados con el tema de las preferencias musicales de este país. En general, lo único que vale la pena saber sobre los gustos musicales dominicanos es que la gente, como buenos nacidos en un país tropical y caluroso donde nunca pasa nada que le importe a nadie y descendientes de una tribu taína que se inventó la hamaca que somos, siempre les va a gustar su música tropical, para el can y que sea la misma vaina. En adición a eso existe algo que se llama Nuria Piera que va a cobrarle un cheque a unos patrocinadores por hablar disparates sobre “las malas influencias de la música foránea en los jóvenes”. Lo sabemos y… nada… eso está bien… porque, en serio… ErreDé.

Pero ahora que, para nuestro asombro, hemos descubierto que en la República Dominicana existe un Director de qué se yo que vaina que suena como una fábrica de botellas, a quien le pagan un salario por decir que los metálicos, emos y rastafari son pandillas callejeras, y todo eso con nuestros impuestos… pues ya la puerca retorció el rabo y les traemos “6 cosas que cres que sabes sobre el Heavy Metal gracias a la Policía Nacional, la Prensa Dominicana y Nuria Piera, que son un grandísimo disparate”. Disparates como…

6. El nombre Heavy Metal

Hay pocas cosas en el mundo que puedan ser consideradas más irritantes que el sonido de alguien aruñando un pizarrón, el sonido de alguien tratando de borrar algo de una mesa con un borrador de lápiz desgastado y en el hierro, o el sonido de la voz de tu novia/esposa en el medio de un juego. Posiblemente una de esas cosas sean las palabras “Heavy Metal” saliendo de la boca de Nuria Piera.

Criiiiiiiiiiiiiiik, criiik, criiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiik, crik

Aunque aún se debate sobre el origen del término “heavy metal” para describir al género de música, la versión generalmente aceptada dice que proviene del intento de una revista musical para describir el álbum “Paranoid” de Black Sabbath en la que esta se refirió al sonido como escuchar un “choque de metales pesados”. Lo que tenía todo el sentido del mundo, porque… después de todo… justo a eso se dedicaba parte de la banda, antes de caer en la categoría justo más abajo de ser un desempleado… o sea, ser un rockero…

Accidentes laborales incluidos…

Desde aquel momento, como una típica fábrica de metales, todo empezó a evolucionar y a mezclarse, se probaron nuevos sonidos y estilos, y toda esta loquera con una guitarrita distorsionada provocó la creación de docenas de subgéneros, obligando que para fines de diferenciar de forma más apropiada a cada estilo, se eliminara el término “Heavy” y para nombrar a todo el conjunto se quedara solamente “Metal”.

Porque aunque todos queremos olvidar las clases de química del colegio… alguien siempre tiene la desagradable puntería de mencionarlas.

Hoy el término “Heavy Metal” se emplea para identificar únicamente a aquellas bandas que conservan un sonido similar a lo que fue el “New Wave Of British Heavy Metal” (la nueva ola del heavy metal británico) de finales de los 70s y principios de los 80s, lo que resulta totalmente útil para cuando te lo mencionen no te hagas ilusiones de que vas a escuchar el último CD de Limp Bizkit.

Que gracias al cosmos… el pana debe estar en algún rincón del planeta haciendo películas porno de snuff, que hasta al mismo internet le daría asco tener.
5. La música metal se origina de pactos satánicos y adoración al diablo

Esta creencia, más común de lo que uno se imagina, es particularmente divertida. Al ser un país donde hace mucho calor todo el año y la gente le mete empeño a sus creencias religiosas, es sólo natural que haya mucha gente bruta, en o rayando en el analfabetismo, no pensando en el futuro y esas pendejadas, y desperdiciando oxígeno viendo imágenes milagrosas de la virgen y Jesucristo en cada rincón que su creatividad se lo permita.

Por ejemplo…

Por lo que resulta predecible que cuando se les presenta algo distinto a la misma mierda de siempre… estos les consideren “malas influencias foráneas” o directamente “satánicas”.

Pero mírenlo… parece un panita chévere.

El metal nació a finales de los 60s, y con muy buenas razones de haberlo hecho en esa época. Luego de ver como las cosas se pusieron bastante estúpidas entre 1939 y 1945 y después disfrutar la prosperidad de los 50s, mucha gente sin oficio pensó que la humanidad ya debía embarcarse a vivir en paz, amor y harmonía entre las civilizaciones para un mejor futuro.

En imagen: Gente sin oficio.

El mundo, como mundo que es, les respondió con ponerles de ahí a ahí de un final feliz con nubes en forma de honguitos con la Crisis de los Misiles en Cuba, a lo que los hippies respondieron alzando más su voz y masificando su movimiento, a lo que el mundo les ripostó con la Guerra de Vietnam para reclutar hippies y mandarlos adelante a pelear con los amarillos… porque van pal diablo los hippies!

Y van para el diablo los bosques tropicales también!

Esto, sumado a la crisis económica de mediados de los años 60s en la Gran Bretaña empezó a incidir para que el ánimo de la gente, así como de su música, pasara de florecitas y arcoíris a ponerse un poco más serio y oscuro. Y así, aunque Black Sabbath, Deep Purple, Led Zeppelin y Judas Priest son generalmente consideradas como las bandas fundadoras del género, mucha música de la época desde The Who, Jimi Hendrix, The Velvet Underground, Janis Joplin hasta David Bowie ya empezaban a girar hacia cosas más agresivas u oscuras que hoy pueden ser consideradas “Heavy Metal”… incluyendo la banda que oyen tus abuelos… The Beatles…

Agárrame ese “Yesterday” ahí…

Así que como a todo en general, el metal nació en reacción a lo que pasaba en la sociedad. No sorprende que ocurriera aproximadamente al mismo tiempo que nace el cine de terror en la forma como lo conocemos hoy, e igual como siguió pasando en la música con el disco que nace con el fin de la guerra de Vietnam y la prosperidad económica de principio de los 70s, luego el punk con otra crisis económica en Gran Bretaña a mediados de los 70s, y como todo se fue a la mierda con la crisis mundial de finales de los 70s y principio de los 80s cuando, para rematar, el mundo nos trajo…

El disco murió, el metal se aceleró, el rap nació, el atari se pegó, Jason empezó a decapitar cabezas los Viernes 13, los iraníes barajaron el can con los rehenes, Centroamérica se prendió en fuego y la Unión Soviética colapsó… de milagro el mundo no explotó con los cojones/ovarios de esos dos.
4. Los metálicos adoran a Satanás y hacen ritos satánicos

Claramente este es el mito más conocido y difundido en nuestro país respecto del metal. Es algo tan enraizado en nuestra mente por sacerdotes, psicólogos escolares, la prensa y nuestros padres que eso se da por sentado hasta para hacer noticias en supuestos “diarios serios”. Así que ya, para poner fin de una vez y por todas a ese disparate, aprovecho este medio para decirles que………… sí… en el metal hay bandas abiertamente satánicas…

Dentro de cinco años usted podrá tocar esta imagen con su smartphone y descubrirá que esa agua está tibia.

Y también hay bandas cristianas, musulmanas, judías, budistas, ateas, agnósticas, racistas, gay, anti-inmigrantes, pro-inmigrantes, etc., etc., etc. lo que es algo totalmente predecible si recordamos que el metal nació como música de protesta y como una alternativa a cantar de amores adolescentes, tener sexo y sobre “la jeva que me pegó los cuernos”. En serio…

Cuantas veces en esta semana usted ha estado en “cocoró” vs cuantas veces ha pensado que está harto de toda esta vaina?

Aunque usted no lo crea, para ser satánico no se necesita escuchar un género de música en particular; usted puede ser bachatero y tranquilamente adorar al Señor de la oscuridad mientras llora por su mujer. El satanismo en el metal de hoy en día se concentra en un puñado de bandas que las oyen tres gatos dentro del género conocido como Black Metal. Y aunque la vertiente “satánica” de ese género tiene bandas dispersas por casi todo el mundo, y un par de locos viejos en Latinoamérica, casi todo se concentra o se influenció específicamente del Black Metal que se hace/hizo en Noruega…

Esta Noruega…

Imagine despertar un día en un campo en Noruega. Su vida ya está resuelta desde el día en que nació y no pasa calores… desempolva un poco su iglú antes de salir, saluda a Santicló de camino al trabajo, abre su silla plegable sobre un río congelado y se sienta a pescar bacalao. Es sólo natural que con una vida en ese estilo la gente termine suicidándose o haciendo bandas de metal para protestar por los beneficios que se cobra la Iglesia Católica de los altísimos impuestos que cobran en Noruega y para ello yéndose en versiones fundidas de dizque satanismo, magia negra, neo-nazismo y…

Robándole el maquillaje a la hermanita, posando con armaduras de vikingos, jugando en los bosques con los amiguitos y metiéndose en los castillos de los otra señores feudales.

El Black Metal hoy representa apenas un subgénero muy reducido dentro del género más grande que es el Metal, y considerando que dentro del mismo Black Metal hay una cantidad apreciable de bandas cristianas (sí… Black Metal Cristiano)… la vertiente “satánica” es apenas el grupito gracioso del que todo el mundo saca una sonrisa de gratis…

Por ejemplo…
3. En el metal hay mensajes subliminales llamando a convertirse al satanismo

El rock desde sus inicios por allá por los años cincuenta, ha vivido bajo el ataque de una porción relevante de la sociedad que desde aquel entonces le ha considerado como una mala influencia. Esto se debía esencialmente porque era medio rápido, medio bulloso y ponía locas a las muchachitas en los colegios y universidades sin tener el caché que tenían los Crooners.

Y en vez de promover el alcohol y las apuestas, promovía lo que sea que se mete Keith Richards por la nariz que al parecer le ha hecho la versión en carne y hueso de Munra El Inmortal.

Al producirse importantes avances en la tecnología de la grabación desde principio de los 60s, las bandas de rock no sólo experimentaban con la música que tocaban, sino con la forma en que la grababan poniendo pistas unas sobre otras, manipulando la velocidad de lo que se grababa, editando las partes al gusto, e incluso poniendo pistas en reverso para agregar más disonancia donde ellos deseaban. Y ante esto… alguien allá afuera pensó “Hmmmm… pistas al revés…”

Y todo empezó a ponerse un poquito más estúpido…

Por ejemplo, The Beatles (la banda favorita del ex Presidente Leonel Fernández y Juan Luis Guerra) no era muy popular entre los cristianos más enfermizos de aquellos tiempos, después de todo… eran rockeros, británicos y en una ocasión se les zafó decir que ya eran más populares que Jesucristo. Esto, obviamente, secó las pocas neuronas vivas que les quedaban a algunos y decidieron unirse con los fans conspiranoicos que creían que Paul McCartney estaba muerto desde 1966… que, naturalmente, derivó en oír los discos de The Beatles al revés y descubrir lo que para los conspiraranoicos era prueba irrefutable de la muerte de Paul y lo que para ellos era prueba irrefutable de un pacto con el diablo… en la canción “Revolution 9” del White Álbum al revés dicen “turn me on dead man” (excítame hombre muerto)… en serio… a lo que The Beatles, seguramente perplejos de que existían personas metiendo un crack tan barato como para ponerse a oir sus discos al revés, respondieron…

Hmmmm, publicidad gratis… gracias!

Y en lo adelante montones de bandas de todos los géneros, incluyendo desde los poco queridos del metal hasta los más reconocidos como Oasis, empezaron a meter mensajes al revés en algunas canciones para burlarse de todo el fenómeno de la música al revés, alborotarles las vaginas a algunos social-conservadores sociópatas, y bueno… las risas. Y es que de este lado del planeta donde la gente no usa turbante, si en realidad eres satánico…

No hay mucho problema si lo dices derechito y para que todo el mundo lo entienda…

Y los creyentes de que The Beatles eran satánicos? Muy bien, activos e igual de locos hoy en día, gracias por preguntar.

2. Esa música es sólo bulla

En un país donde una considerable cantidad de personas entiende que la música viene de la mano de una güira y una tambora, o de pistas recicladas de Cutty Ranks o Playero, es natural que una guitarrita con “distoltion” les suene como a las hordas de satanás levantándose desde el infierno… o simplemente bulla…

Bulla…

La realidad es que el metal, no muy distinto del rock… y la bachata, ya que estamos en esa… tiene una fuerte raíz en el blues, la música de los negros esclavos africanos. Sin embargo, en su búsqueda de un sonido más semejable a la sensación de ver una película de terror (que es una de las bases por las que siquiera se hizo el género), los metálicos incorporaron (algunos quizás sin saber) elementos de la música clásica, el barroco y el romanticismo, como la escala harmónica y los tritonos, usando la 5ta disminuida para emular la tensión que usaban Brahms, Liszt y Tchaikovski en sus sinfonías, y los conciertos para violín de Niccolò Paganini para inspirar sus solos de guitarra.

Quizás más personas compraran música clásica si tan solo sus autores hubiesen sabido la belleza detrás de usar el maquillaje de la hermanita.
PD: Si te estás rompiendo la cabeza y preguntandote quién es este, es Niccolò Paganini (cultura con sabrosura)

Claro, su gusto por la 5ta disminuida no ha sido muy útil para la imagen “no-satánica” del metal, puesto que desde al menos el siglo XI cuando la Iglesia Católica empezó a incorporar las rondas en la música eclesiástica debido a la popularidad del estilo generada por los trovadores ingleses, franceses y alemanes, estos ya prohibían el uso de ese intervalo al que definían como el Diabolus in Música (y creo que usted ya sabe lo que significa eso). Curiosamente, todavía hoy el uso de la 5ta disminuida (o la 4ta aumentada) sigue estando prohibido en la música eclesiástica por el Decreto Universal para la Música de la Liturgia en los Cantos Gregorianos y el Musicam Sacram, no obstante a que toda esa música clásica que usted considera solemne y que seguro muchos sacerdotes escuchan, está llena del Diabolus in Musica.

En imagen: Satanás.

Y así el Metal ha ido evolucionando a base de fusiones con muchísimos géneros musicales y los hay quienes lo mezclaron con la música folklórica celtaotros con el rap, con el jazzcon el swing, con la bossa nova, con la sambacon la salsa, con el avant garde, con la música electrónica, con el flamenco, y ya creo que ustedes se pueden hacer una idea.

Podemos hacer esto todo el día.
1. Los músicos son unos salvajes anti-sociales y sus fans unos locos desquiciados

Dado a todo lo que ha sido inculcado a nuestra sociedad por la Policía Nacional, la Prensa (con más faltas ortográficas e informaciones infundadas del mundo) y Nuria Piera, la imagen que tienen muchos sobre el metálico común es que este duerme boca abajo en una cueva durante el día, y que sale a sacrificar pollos en los cementerios durante la noche…

Aparentemente, Satanás es loco con unas pechurinas.

La realidad es que en el mundo del metal, a menos que el nombre de tu banda empiece con «M» y termine con «etallica», es muy probable que si pretendes vivir de la música que hace tu bandita ahora mismo te estés comiendo un cable… por lo que es común que incluso en las bandas establecidas y conocidas dentro del género, sus músicos tengan que ubicarse un trabajo de 8am – 5pm para que ellos y sus familias no se mueran de hambre.

Otra más…

Y así Wagner Lamounier de las bandas Sepultura y Sarcófago tiene un PhD en Economía y es profesor universitario, Yanic Bersier de Quo Vadis tiene un PhD en física, Ville Vänni de Insomnium es un cirujano, Brent Hinds de Mastodon repara techos, Paul Masdival de Cynic y ex en Death compone música para los soundtracks de Disney, Matt Barlow de Iced Earth es un bombero, Bobby Wright de la banda Brocas Helm es un electricista, Bob Rusay ex guitarrista de Cannibal Corpse es un instructor de golf, Gio Geraca de la banda Malevolent Creation es un bartender, Sotiris V. de Septicflesh trabaja en un banco, Warrel Dane y Jim Sheppard de Nevermore son cocineros, Ross Dolan de Immolation es un camionero, Robert Fripp de la banda King Crimson hace los soniditos de Windows, Eric Adams de ManOWar es un trabajador de la construcción y……… Andreas Hedlund de Vintersorg, Nocturno Culto de Darkthrone, King ov Hell ex de Gorgoroth, Karl Logan de ManOWar, Anders de At The Gates, Steve Von Till de Neurosis, Mike Suss de Possessed, Roman Saenko ex de Hate Forest, Björgvin de Skálmöld, entre muchos, muchos otros son… profesores de primaria.

Y son profesores en sitios como Noruega, Suecia, Finlandia y Alemania que resultan tener la mejor calidad de la educación primaria en el mundo. Por lo que podemos ver que en general los metálicos son tipos bastante normalcitos, con trabajos normales para no comerse un cable y que se ponen a hacer su escándalo por puro amor al arte. Sin embargo, en mi investigación sobre la profesión de los músicos del metal noté una conspicuamente ausente…

Políticos… hasta los mismos metálicos prefieren guardar las distancias de ellos.

Finalmente, nos gustaría agregar un par de detalles que usted probablemente no sabía sobre celebridades que seguramente ha admirado en algún momento, ya sea porque los hace reir o porque usted es del tipo de personas que lee revistas para gente bruta, o sea, de farándula y/o novelas.

La escena del concierto de metal extremo en «Ace Ventura Pet Detective» (Ace Ventura, Detective de Mascotas) no es pura coincidencia. La misma fue solicitada y orquestada por Jim Carrey, ya que Cannibal Corpse no sólo es su banda favorita, sino que son muy buenos amigos.

Sí, ese Jim Carrey es metalico y orgulloso de ello.

Por otro lado, tenemos a Weston Cage, hijo de Nickolas y vocalista de «Eyes of Noctum» quien a pesar de ser un «metalico loco» como lo llamarían la mitad de las personas que están leyendo este artículo, acompaña tranquilamente a su padre cuando va a NO ganar premios en las actividades de la academia.

Ese momento en que tu hijo usa más maquillaje que tu esposa.

Esta siguiente es una de las que más nos gusta mostrar sólo para ver la reacción de las mujeres en particular. Nos referimos en este caso a Juan Esteban Aristizábal Vásquez. Sí, Juanes antes de ser el bonitillo que vuelve loco las chicas con su «camisa negra» era el vocalista de Ekhymosis pero chocó con una pared llamada «realidad» y como ya explicamos anteriormente… HAY QUE COMER.

Sí, ese es Juanes tocando Thrash Metal. No estás bajo la influencia de la moringa.

Y aquí le dejamos un videito de ñapa…

Ya por último, para que dejen de barajar tanto y justifiquen sus sueldos, nos gustaría cerrar con Cristian Castro y su tatuaje de Tool.

Por años se debatió el hecho de que el tipo tenga un tatuaje del primer logo de la banda de Rock Pesado, Tool (considerado metal en diferentes círculos). Unos decían que era pura coincidencia y que seguro se lo hizo por la forma fálica del mismo, obviamente apostando a su preferencia sexual. La realidad es que Cristian es un metálico pero el género no le da para satisfacer sus antojos materiales.  Aquí les dejamos un video donde el artista pop hasta canta «Crazy Train» de Ozzy Osbourne y habla un poco de cómo surgió la idea del tatuaje.

Esperamos que los niveles de ignorancia sobre el género hayan bajado un poco o que por lo menos se hayan entretenido. Si no… ¡VAN PAL DIABLO! (pero a comer pechurinas con él).

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